monicaco

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Bermejo

A veces los astros se colocan en fila y entre las nubes se filtra un rayo de luz divina mientras suenan trompetas celestiales acompañando al aleluya de Hendel.

Un día así comenzó monicaco a trabajar en el guiñol del por entonces ministro de justicia Mariano Fernández Bermejo.

Tan pronto como el director del programa le desveló que éste sería su próximo reto, busco unas fotos en internet y garabateó un primer boceto a boli bic en un hueco del guión de ese día.

En un par de horas escasas tenía el boceto en plastilina que fue aprobado esa misma tarde, al día siguiente empezó el modelo definitivo y en menos de una semana empezaba a sacar el molde.

Sería emocionante imaginar que el molde estuvo a punto de romperse o que una horda de orcos arrasó la terraza donde trabajaba nuestro amigo destrozando todo a su paso... pero que va! contra todo pronóstico el guiñol más expresivo que hebía diseñado nuestro amigo vio la luz en un tempo récord con indudable éxito de crítica y público.

Como monicaco, en contra de lo que opinan sus acreedores, es majo y de naturaleza sencilla decidió otorgarle la categoría de "mi guiñol favorito del mundo mundial" sólo por eso, por resultar fácil y poco problemático.